Oportunidades para las mujeres
Desde sus diferentes actividades, las mujeres juegan un papel importante en la actualidad, desde el ámbito doméstico hasta una oportunidad en la presidencia de México.
Ruidos de cubiertos y platos. Sentados a la mesa un sábado por la tarde, Laura de 33 años, discute con su padre sobre el alza de precios en distintos productos de la canasta básica, el elevado costo de los medicamentos, las consecuencias de la migración y el fastidio de subirse al transporte público que se satura por las reparaciones en la línea 12 del metro. El calor del debate se empieza a sentir porque emprenden una lista de todos los problemas que se viven actualmente en el país, hasta que Luisa, mamá de Laura, pide silencio. “Para qué hacer corajes uno, mejor comemos tranquilos”, señala Luisa, defendiendo la paz del momento y pidiendo que en la mesa no se toquen temas polémicos.
Este tipo de episodios son frecuentes en casa de la familia Reyes, ubicada en el sureste de la Ciudad de México, donde Laura, suele tomar el liderazgo al abordar sus preocupaciones económicas y, sobre todo, su molestia por las deficiencias del sistema educativo en México. Luisa es ama de casa y tiene un carácter fuerte. Laura trabaja como administradora de empresas y se pregunta: ¿Cómo asegurar el desarrollo de su hija de 6 años en un país como este?
En muchas familias mexicanas la agenda de los padres y abuelos gira alrededor del cuidado de los más pequeños. En el Estado de México, la familia Fuentes, por ejemplo, se siente orgullosa del trabajo colaborativo de las mujeres para atender a Regina, la nieta más joven. Pero esto no parece suficiente. En estos días, muchos estudiantes buscan mejores oportunidades educativas. Respecto a las instituciones públicas, Liliana Armenta, en Naucalpan, piensa que “la educación es arcaica. Les deberían de enseñar a hacer investigación con las herramientas actuales. Deberían mostrarles formas de hacerse la vida más fácil, qué programas usar, qué hay allá afuera para lograr eso que están buscando”.
Así, en familias conformadas por mujeres que gradualmente han ganado espacios, no resulta extraño que se sientan atraídas por la posibilidad de tener, en la siguiente contienda electoral, a una mujer en la presidencia. Las cosas han cambiado, “Antes no se había visto esto, o la verdad no lo recuerdo, pero está muy bien que le den oportunidad a una mujer, sería interesante ver cómo maneja el país”, confiesa José Reyes. Las candidatas en el contexto de las elecciones federales han abierto nuevos debates porque la coyuntura no beneficiaría sólo a una, sino a las siguientes generaciones de mujeres en espera de tener una mayor participación en su país.
